El primer triunfo del Real Madrid en un Clásico femenino en toda la historia no podía llegar de otra manera que beneficiándose de un grave error arbitral. La árbitra vasca Rivera Olmedo se inventó un fuera de juego de Graham para anular el 2-1 de Jana en el tramo final y las blancas lo aprovecharon para marcar el segundo poco antes del noventa. Se acabó pues el pleno de triunfos azulgrana en los Clásicos y las blancas salen de Montjuïc a cuatro puntos del Barça.
A quién se le diga que el equipo que arrolló el pasado miércoles al Wolfsburgo en Alemania y el que salió ayer al campo para medirse al Real Madrid era el mismo, no se lo cree ni loco. Quizá por los precedentes, con pleno de victorias azulgrana, o puede incluso que por aburrimiento, aunque se empeñen en decir en los días previos siempre que un Clásico es especial, pero el Barça salió al partido al trantrán. Dominando, sí, pero a un ritmo bajo y sin ser punzantes en los metros finales. Y eso que Toril había dejado en el banquillo hasta seis jugadoras que fueron titulares contra el Arsenal en Champions el martes.
Lee también Fernando Polo
Pere Romeu tampoco es que saliera con el once de gala. Descansaron Jana, Brugts y Salma y tampoco salieron de inicio potenciales titulares como Pina, Engen o Vicky. Y así, como quien no quiere la cosa, el Real Madrid, que tuvo sus apariciones en el área de Cata Coll, se fue al descanso por delante en el marcador aprovechando un cúmulo de despropósitos.
Graham estaba fuera del campo tras ser atendida y sin que la colegiada Olatz Rivera la dejara entrar en el campo. Precisamente por su banda llegó el centro de Moller al área, Alba Redondo le ganó la posición a Paredes y con un toque de cabeza superó por alto a una Cata Coll que había salido a por uvas.
Galería El Barça-Real Madrid, en imágenes Pere Puntí / Propias
Graham pudo igualar antes del descanso pero cuando lo tenía todo para rematar a puerta vacía un centro de Alexia, la dirigió al cuerpo de una Misa ya batida.
Triunfo blanco al descanso y apenas cuatro fogonazos de calidad de Sydney, que fue la mejor del primer tiempo. No lo debió ver así Pere Romeu porque la cambió al descanso, danto entrada a Salma y de paso quitó a Marta por Jana.
FC BARCELONA
REAL MADRID
El Barça, ya con un once más titular, tardó bastante en volver a ser el Barça. Después de regalar poco más de una hora de partido, y cuando empezaba a palparse algo de ansiedad entre las culés, llegó un centro de Mapi León desde la izquierda y la cabeza de Graham para igualar el choque. Quedaba media hora y empezaba un nuevo partido.
Reaccionó rápido el Madrid y pudo volver a ponerse por delante, pero Cata se lució con un paradón a tiro de Angeldahl.
El diluvio universal apareció en Montjuïc y protagonizó el tramo final del partido, haciendo más épico el tramo decisivo del encuentro. Y en un duelo con tantos ingredientes, el ‘robo’ al Barça no podía faltar. Gol absolutamente legal de Jana Fernández para poner el 2-1 en el marcador pero la colegiada Olatz Rivera se inventó un fuera de juego de Graham para anularlo.
Con las azulgrana en cólera por la decisión arbitral, el Madrid pescó en río revuelto y Weir se adelantó a la marca de Brugts tras una cabalgada de Caicedo para batir a Cata y poner el 1-2 en el electrónico. La propia Weir firmó un tanto más concedido por la árbitra aunque no parece que el esférico despejado por Mapi León sobre la línea hubiera entrado del todo.